El Gobierno y el Govern de la Generalitat han formalizado este miércoles el acuerdo para el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV), que han firmado la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, y el conseller de Drets Socials, Carles Campuzano. Ha sido después de que se hayan reunido el president, Pere Aragonès, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quienes han estado presentes en la firma. Un encuentro entre los dos mandatarios que no se llevaba a cabo desde hace medio año y que se da en plenas negociaciones entre PSC y ERC para la investidura del socialista Salvador Illa.
Tras la firma, Saiz y Campuzano han comparecido delante de los medios de comunicación para dejar claro que el acto de este miércoles "está separado" de las negociaciones de investidura. "Es muy importante diferenciar acuerdos, trabajos y diálogos entre gobiernos de unas negociaciones", ha remarcado la ministra, quien ha insistido en que "han trabajado con total normalidad para abordar las cuestiones que les importan a los catalanes".
En la misma línea, el conseller Campuzano ha apuntado que estos acuerdos son diferentes "a las conversaciones que puedan tener los grupos parlamentarios para pactar una investidura". Además, ha reivindicado que el hecho de que el Govern esté "en funciones", no les "exime de cualquier responsabilidad para alcanzar y firmar traspasos como este".
Saiz ha asegurado que en junio, en Cataluña, 200.000 personas y 61.000 hogares (el 45% con menores de edad) se beneficiaron del IMV. Desde su punto de vista, el traspaso de la gestión permitirá ganar “eficacia” para hacer frente a las situaciones de vulnerabilidad y ha insistido en que el ministerio "está empeñado" en seguir reduciendo la pobreza en España.
El convenio firmado este martes por el Gobierno y la Generalitat prevé que el Ejecutivo catalán asuma las funciones de gestionar el IMV en un plazo de nueve meses. Acuerda compensar a la Generalitat por la gestión con 2.817.547 euros para este año: la cifra será proporcional en función del momento en que se haga efectivo el traspaso y se actualizará anualmente con el incremento de las retribuciones del personal funcionario.
El Govern es la tercera comunidad en asumir la gestión
Dos años después de que Euskadi y Navarra asumieran la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV), el Gobierno da un paso más para la cesión de esta competencia a otras comunidades. Ahora, Cataluña se convierte en la tercera comunidad en tener el control de la prestación, y, según Saiz, Galícia, Castilla y León y la Comunidad Valenciana también han pedido la gestión directa.
Saiz y Campuzano han coincidido en que esta medida permitirá a la administración catalana ser "más eficaz" para combatir la pobreza en Cataluña. Además, el conseller ha detallado que la meta es reducir el tiempo de espera de la prestación a los 66 días y equipararlo al de la Renda Garantida de Ciutadania (RGC). "Nuestro objetivo es reducir sustancialmente el tiempo de espera", ha apuntado sobre el IMV. Según el conseller, el período de respuesta ahora para esta prestación es de 144 días.
Campuzano ha recordado que la RGC y el IMV tienen objetivos y destinatarios muy similares, pero que hasta ahora dependían de dos administraciones diferentes, cosa que sometía la ciudadanía a un “infierno burocrático”.
También ha señalado que muchas personas con derecho al ingreso mínimo vital no lo piden porque ya cobran la renta garantizada. De hecho, según Campuzano, solo 12.529 perceptores del RGC complementaban esta prestación con el IMV. En este sentido, ha señalado que tienen "la previsión de implementar la ventanilla única en nueve meses" y solucionar la duplicidad burocrática.
El Govern pide más competencias en seguridad social
Finalmente, Campuzano ha destacado que esta era "una reivindicación histórica" del departamento desde que se puso en marcha la prestación desde Madrid. “Es una batalla que hemos mantenido durante mucho de tiempo”, ha comentado el responsable de Derechos Sociales de la Generalitat.
Además, ha puesto de manifiesto que este "es un paso muy importante" para reforzar la capacidad de intervención de la administración catalana en el campo de la seguridad social. Ha comentado que la voluntad del ejecutivo catalán es poder tener el control del conjunto del sistema de la Seguridad Social para "garantizar los derechos de la ciudadanía".
Un encuentro "cordial" y de "normalidad institucional"
A las 12 horas, el jefe del ejecutivo catalán ha recibido a Sánchez a las puertas del Palau de la Generalitat, después de que no hubiera un encuentro institucional entre ambos desde el pasado 21 de diciembre de 2023. Los dos presidentes se han reunido para abordar "la situación política" y valorar los acuerdos de investidura que llevaron nuevamente a Moncloa a Sánchez.
En un comunicado conjunto, fuentes de ambos ejecutivos han explicado que la reunión entre los presidentes ha transcurrido en un clima cordial y de normalidad institucional. Durante la misma se ha hecho un repaso de la relación entre ambos gobiernos, tras la firma de diversos acuerdos esta última semana que concretan y calendarizan diferentes transferencias pendientes. Entre ellas están la del servicio de Rodalies, las becas y ayudas al estudio o las iniciativas de investigación y desarrollo.
Los dos presidentes han analizado el desarrollo de estos acuerdos y se han comprometido a trabajar para "culminar su cumplimiento en beneficio de la ciudadanía de Cataluña". Fuentes del Govern en funciones han asegurado que el jefe del ejecutivo catalán ha presionado a Sánchez para que "se mueva" hacia la financiación singular y le ha insistido en la resolución del conflicto político. Esta es la quinta reunión institucional que mantienen ambos mandatarios desde 2021.
En paralelo, también se han reunido la vicepresidenta del Govern en funciones, Laura Vilagrà, junto al ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, para tratar y valorar la aplicación de la ley de amnistía.
Sánchez se reúne con Illa
Coincidiendo con su visita a Barcelona, el presidente del Gobierno se ha reunido con el secretario general del PSC, Salvador Illa, en una comida de trabajo. Según fuentes del partido socialista, el encuentro ha sido en el barrio del Raval y ha durado unas dos horas.
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